El festival reunirá alrededor de un centenar de películas, producciones que responden tanto al interés de un público conocedor de las cinematografías procedentes de Asia, como de aquellos que desean empezar a saber qué nos transmite un cine no tan nuevo. El exotismo que en occidente se ha solido atribuir a estas producciones ha sido sustituido por la aportación que éstas últimas han hecho y siguen haciendo para construir culturalmente una identidad inseparable de la pertenencia al territorio.
Uno de los objetivos del festival es explorar a este extraño o extranjero que el cine nos muestra, y estimular el interés por el descubrimiento. De ahí que la programación pretenda ser inclusiva; no tanto con la intención de abarcar más títulos cada año, sino para dar visibilidad tanto a aquellos autores conocidos que ya cuentan con una base de seguidores, como también a los menos populares. La propuesta consiste en brindar opciones para explorar narrativas y trayectorias locales y globales, con el fin de rescatar culturas que son referentes identitarios, cuya visibilidad nos aporta un conocimiento imprescindible del que consideramos otro, extraño o extranjero, en relación con el territorio, y con uno mismo.
El festival mantiene su formato agrupado en las seis secciones a competición: Oficial, Oficial Panorama, Discoveries, NETPAC, Sección Especial y Nuevas Miradas, en las que se distribuirán estratégicamente los diferentes títulos seleccionados. Los jurados correspondientes se componen de aquellos integrantes designados a tal fin, directores, críticos de cine y escritores que aceptan cumplir esta función.
Aborda una extensión geográfica, que va desde Irán, Asia Central, una región que comprende las exrepúblicas Soviéticas de Kazajistán, Kirguistán y Uzbekistán, a la que se suman Afganistán, India, Pakistán, Bangladesh y Sri Lanka, el Sudeste asiático con China, Corea, Japón, Tailandia, Singapur, Malasia, Camboya y Vietnam, y la zona del Asia Pacífico con Australia y Nueva Zelanda.
El Asian Film Festival Barcelona cuenta con el apoyo del Institut Català de les Empreses Culturals (ICEC -Generalitat de Catalunya), Institut de Cultura de Barcelona (ICUB-Ajuntament de Barcelona), Hong Kong Economic and Trade Office, Brussels, (HKETO), Fundació Institut Confuci de Barcelona (FICB), Embajada de Australia y Japan Foundation, entre otros.